Te perdí como quien pierde un sueño.

No sé dónde estás, no sé cuál es tu mundo, no sé cuál es tu cielo.

Como antes fuiste presencia, ahora eres ausencia, pero acaso aclaro, los amores que llegan a mi vida en lugar de alejarte te acercan.

Todos morimos una muerte pequeña antes de que llegue la otra, la definitiva, la del olvido grande. Y tú eres por ahora mi agonía pequeña...

Sabes, más que tu ausencia me pesa esta terrible soledad que no tiene días, ni horas, ni tiempo. Me acuerdo que una noche conversábamos y te pregunte, si dejarías de quererme; y me dijiste sí...  ¿Y serias capaz de olvidarme?,  me contestaste, eso no.

Entre ese sí y ese no cabe toda mi angustia, nos quisimos con un amor ancho y hondo, amor que no se merecía este olvido... no te he llorado aun, perpetrarte, te lloraría como se llora los muertos muy queridos, a solas y quedadamente.

Oh, si volviera a verte! pero es imposible lo se... pero si alguna vez volviéramos a encontrarnos te haría esta pregunta; ¿Qué estrella has elegido para verte en ella todas las noches, a la misma hora? Quiera mi dios que las señales de mi nombre lloren mi ausencia para que nadie pueda llamarte como yo te llamaba.

Te perdí como quien pierde un sueño, no sé cuál es tu mundo, ni se cuál es tu cielo, no se donde estas, sólo se que estoy contigo...

Luis Gerardo Tovar - Te perdí