No se que pasó ayer. No se quién llamo. Solamente se que me puso mal de igual forma, mal por el hecho de no saber quien lo hizo, mal por esperar que fuera él, mal por saber que de ninguna forma es posible que haya sido él y ese es el problema, no importa lo que haya pasado, importa que no llama y yo sigo esperando volver a escuchar su voz...
Y aunque me muera por saber, una vez más. Aunque siga con las ganas de tener esa charla debida, pasó demasiado tiempo y ya no hay forma de que intente hablarle, creo que cuando tenes palabras viejas para decir, lo mejor que se puede hacer es esperar que alguien venga a decir algo nuevo.
Y eso es lo que hago, aunque se me destrose el alma todos los días un poquito, ya vivi exactamente lo mismo por 7 meses, pensar todos los días, en un día más, no me hace más o menos daño. El daño es el mismo. No va a cambiar. Pero lo que al final de todo quiero decir, es que el hecho de yo, poder admitir que soy valiente por vivir así, eso no va a hacer que el pasado vuelva a mí.
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